Jornaleros de la Montaña de Guerrero se debaten entre la pandemia o morir de hambre
Tlapa, Guerrero, 07 de noviembre de 2020.- En los últimos días, decenas de familias indígenas jornaleras de la región de la Montaña de Guerrero, han migrado a 22 estados de la república mexicana para su subsistencia.
De acuerdo con el Centro de Derechos Humanos de la Montaña de Guerrero Tlachinollan, en el mes de octubre mil 170 jornaleros, siendo 545 mujeres y 626 hombres, viajaron a los campos de estados como Chihuahua, Sonora, Michoacán, Baja California, Guanajuato y Zacatecas.
Sin embargo, en septiembre fue el mes en que más flujo migrante se registró al contabilizar 2 mil jornaleros siendo un 57% hombres y un 43% mujeres.
En ese mes el flujo de personas aumentó ya que las empresas agrícolas como Famer's Best, Exportalizas Mexicana, Rene Produce, Valores Hortalizas del Pacifico, Ceuta Produce, mandan a traer a los jornaleros con la modalidad de contratación.
De los 2 mil jornaleros que se registraron en ese mes, 674 personas no fueron a la escuela, mientras que algunos jornaleros acudieron a un recinto escolar, pero no todos la culminan, ya que conforme van pasando de grado los gastos se vuelven más altos y debido a la escasez de oportunidades dentro de sus comunidades optan por salir a trabajar y buscar una oportunidad para vivir con lo necesario.
Generalmente todos son hablantes de un idioma originario. La mayoría de las familias jornaleras que pasan por el viacrucis de la migración y que además son explotados en los campos agrícolas son hablantes del Tu'un Savi, Me'phaa y nahua. Y tan solo con un 14% el idioma mestizo se encuentra presente.
Solo en este mes de septiembre las personas salieron más por contrato y es que se les prometen mejores condiciones y un buen pago, para esto la empresa envía autobuses para la gente o en ocasiones los contratistas son quienes se encargan de eso en comunicación con la misma empresa.
En meses anteriores los estados receptores con mayor flujo de gente eran Chihuahua, Baja California y Zacatecas pero en este mes bajaron los números y el estado de Sinaloa se volvió el principal receptor de la población migrante.
Las empresas solo contratan gente mayor a 17 años, por lo que en algunas ocasiones los padres dejan a los hijos de 3-5 y 0-2 años, con los abuelos o en su mayoría, los menores pasan las travesías junto a sus progenitores.
Tlachinolllan contabilizó que los jornaleros que más migran oscilan en las edades de 18 a 25 años.
Inclusive, hay mujeres que acuden a trabajar estando embarazadas. En el mes de septiembre sumaron cuatro mujeres de 24 años con un mes de embarazo y seis mujeres de 23 años con un les de embarazo, por lo que en muchas ocasiones llegan a tener a sus hijos en los campos y no los registran hasta que regresan a su lugar de origen.
Cabe destacar, que la pandemia por la Covid-19 no ha sido impedimento para que los jornaleros guerrerenses dejen de emigrar y trabajar sino por el contrario, viajan en busca de mejores oportunidades.
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