Violencia sin freno, ¿quién la detiene?

 

Por: Ernesto Galeana 

En menos de 24 horas se suscitaron seis hechos de violencia en el puerto de Acapulco, que dejaron como evidencia el vacío de poder y la inseguridad que se vive en este municipio. 

Iniciaron el domingo por la tarde cuando un taxista fue asesinado en la Costera Miguel Alemán mientras manejabae su vehículo. El cuerpo de la víctima quedó en el asiento del conductor, con múltiples impactos de bala.

Más tarde el mismo domingo, otro ataque a balazos en la playa Condesa; el crimen tuvo lugar minutos antes de las 17 horas, cuando hombres armados llegaron a la playa a bordo de una embarcación menor, descendierpm para perseguir a un hombre a balazos hasta darle alcance y luego huir sin que pudieran detenerlos.

Este lunes en tan solo un lapso de horas se presentaron en distintos puntos hechos violentos que ni los cientos de elementos de la Guardia Nacional  Ejército o peor aún, los policías que integran en el programa que creó la alcaldesa Abelina López Rodríguez, "fuerza Acapulco" pudieron prevenir, ni detener.

El primero se reportó en la playa del Morro, donde un vendedor de playa fue asesinado por individuos en un ataque a balazos, y donde además una mujer y dos menores quedaron heridos de gravedad por balas perdidas; más tarde la mujer perdió la vida mientras recibía atención y los menores de 5 y 7 años se reportan graves por heridas en cabeza y torax.

Luego en la playa Dominguillo, ante testigos un ataque más a balazos, esta vez dejó un hombre muerto cerca de la zona de baños públicos.

Más tarde a pesar de las más de tres camionetas llenas de elementos de la Guardia Nacional que arribaron tras un reporte se suscitó una balacera que dejó una persona herida en la colonia Generación 2000.

Y antes de que este lunes negro finalizara, se reportaron varias detonaciones de arma de fuego en la calle José Valdez Arévalo a espaldas de Chedraui Las Hamacas, donde al llegar los elementos de seguridad encontraron una motocicleta abandonada y casquillos percutidos.

En el mismo día que se dieron estos hechos, la alcaldesa posteaba en su perfil de Facebook cómo disfrutaba de unas “ricas patitas de pollo” que le habían invitado durante una “gira de trabajo” con tintes de reelección, donde se le ve ataviada con ropa de campaña contra el dengue que por cierto, va in crescendo, en varios casos con consecuencias fatales, pero en el puerto la autoridad no mira viable declarar emergencia de salud.

Más tarde, en lugar de un reporte sobre la violencia desatada, a la presidenta de este municipio le pareció más importante postear la fotografía de una luna roja, que dar una postura sobre lo que tenemos que padecer los ciudadanos de esta ciudad.