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Celebran misa para agradecer cese de conflicto armado entre grupos criminales


 Por: Rosalba Ramírez 

Acapulco, Guerrero., 27 de febrero de 2024. - En Tlacotepec, cabecera municipal de Heliodoro Castillo, en la Sierra de Guerrero, cerca de 500 habitantes entre niños, adultos mayores y mujeres asistieron la tarde del lunes a una misa especial en agradecimiento por la paz originada por el acuerdo al cese del conflicto armado entre los grupos criminales conocidos como "Los Tlacos" y la "Familia Michoacana".

Los habitantes principalmente de las comunidades de Acatlán, Tetela y El Caracol en donde han sido atacados con bombas molotov lanzadas desde drones, dicen que están tranquilos después del cese de toda la violencia originada por las disputas entre ambos grupos. Ahora ya podrán hacer sus actividades cotidianas, indicó el director del centro de Derechos Humanos "Minerva Bello", José Filiberto Velázquez Florencio en entrevista telefónica. 

La misa "de acción de gracias y rogación por los acuerdos de paz en Guerrero", para pedir por la tregua de paz lograda en algunas zonas de Guerrero, fue anunciada desde la tarde del domingo 25 de febrero, por el obispo de la Diócesis de Chilpancingo-Chilapa, José de Jesús González Hernández, la cual se llevó a cabo este lunes 26, en la Parroquia de Santiago Apóstol en Tlacotepec. 

"Cuando se suscitan estos conflictos, es cuando la iglesia, después de sentir el dolor de sus hijos busca las condiciones y los mecanismos, para buscar que el hombre se reconcilie con su hermano, para crear las condiciones de una paz justa y duradera, porque ya no queremos mostrarle a Dios rostros de hermanos que sufren, que lloran y que viven en la desesperanza y el desconsuelo”, expresó el Vicario General de la Diócesis, Benito Cuenca Mayo quien presidió la misa acompañado del director del Centro de Derechos Humanos “Minerva Bello”, José Filiberto Velázquez Florencio, y algunos sacerdotes de los distintos decanatos de la Diócesis. 

“Las partes en conflicto se han esforzado, han visto el dolor de sus hermanos y por eso hoy estamos celebrando la paz”, añadió. 

Llamó a reconstruir el tejido social que se ha dañado, "porque el conflicto entre los grupos ha costado vidas y ha cubierto de luto a muchas familias" .

Reconoció que hay mucho por hacer por la paz, pero indicó que “la Iglesia, los Obispos de Guerrero y otros obispos del país, queremos seguir en la ruta de la reconstrucción, fortalecimiento del tejido social y la construcción de la paz, en continua lucha y en continuo trabajo para hacer que la paz sea duradera, como fruto también del dialogo y de la oración. Acrecentemos nuestra esperanza, Dios nos ama, Dios está con nosotros y en esta tarde nos sigue expresando su cercanía, su amor y su bondad”.

Cuenca Mayo agradeció la voluntad del obispo José de Jesús González y los Obispos de la Provincia Eclesiástica de Acapulco para construir la paz en Guerrero y reconoció el trabajo del padre Filiberto Velázquez, quien en diferentes momentos apoyó a las familias desplazadas de las comunidades atacadas.

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