Lourdes Caballero: sacar fuerzas para enfrentarse a los regímenes

  

Por Marco Antonio Mönge Arévalo

La familia Caballero vivió dos tragedias en el mismo año, paradójicamente con 43 días de diferencia. La hermana de Israel Caballero Sánchez, la profesora Lourdes, recuerda que su padre "falleció el 14 de agosto de 2014, a causa de un paro cardiaco"; su hermano, desapareció el 26 de septiembre de ese mismo año, en Iguala de la Independencia, Guerrero.  

De pequeño, Israel soñaba con ser profesor. Sucedió, en efecto, pero solo a medias. Con su capacidad para aprender, Israel siguió sus instintos. Así que comenzó a estudiar en la Normal Rural Isidro Burgos de Ayotzinapa, Guerrero.

De las únicas imágenes que perduran en poder de su familia y que Lourdes logró rescatar fue de cuando Israel culminó su educación media superior en su natal Atliaca [una comunidad indígena del municipio de #Tixtla de Guerrero].  Su tío Gaudencio Caballero Bello es el autor de esa fotografía.

A mediados de julio de 2013 Caballero Sánchez egresó de la preparatoria "Emperador Cuauhtémoc" con un promedio superior al exigido para entrar a la Normal de Ayotzinapa: 8.8.  

Luego de ser aceptado en la Normal de Ayotzinapa, Israel también tomaba una nueva responsabilidad en su vida: sería padre de Melanny. Su hija nació el 5 de agosto de 2014, tenía 52 días de nacida cuando su padre de 21 años desapareció. La pequeña actualmente vive en Coahuila y tiene siete años de edad.

Con todo este torrente de datos, con más de 50 años en la espalda, la madre de Israel, pese a ser diabética, enfrentaba y exigía a los gobiernos federal y estatal la aparición con vida de su hijo.  

La madre, quien hace más de dos años viajó a la Ciudad de México [CDMX] para participar en las protestas masivas, se cayó y tuvo una fractura en el pie izquierdo, lo que ha impedido que siga participando activamente en la búsqueda de su hijo. Por lo que Lourdes, rompió con la regla, y se convirtió, después, en un rostro habitual en las actividades de los padres de los 43, en la batalla permanente de tan lamentable pérdida.

La búsqueda de su hermano ha sido un martirio emocional para Lourdes Caballero. Tras la muerte de su padre y la desaparición de su hermano en 2014, esta mujer ha tenido que sacar fuerzas para poder enfrentarse a los regímenes que gobiernan este país.

Para Lourdes, el descanso no es una opción y se mantiene firme.  Afronta un permanente duelo en espera de poder encontrar a su hermano. Con firmeza dice en voz alta:

— No hay otra persona más que se involucre   en el caso de mi hermano, tenemos que seguir. Y aunque mi mamá ya no pueda estar participando, yo lo haré. Cuando yo no pueda alguna de mis dos hermanas estará, pero nunca dejaremos de buscar a nuestro hermano.