Reiniciar desde cero un negocio familiar que se redujo a cenizas

 

Por: Rosalba Ramírez Hernández 

Acapulco, Guerrero., 22 de junio de 2023. - Iris perdió todo en el incendio de la madrugada del cinco de junio en la nave mayor del Mercado Central. No pudo rescatar tan siquiera la imagen de un Jesucristo, pero sus propios compañeros, vendedores humildes que van al día, le han ayudado a restablecer de a poco su negocio familiar, una herencia que llegó a sobrevivir por 40 años desde que su madre decidió emprender.

"Plantas medicinales Iris" tiene una variedad de productos naturales y herbolarios desde la moringa hasta el tejocote para combatir dolores musculares, la gastritis, diabetes, riñones dañados, hígado graso, colesterol, aceite de coco, mamey, papa, sábila, almendra, alcohol, mezcal, pomadas para dolores, pastillas para las reumas y artitris, veladoras para hacer rituales contra las envidias, el desespero e imágenes de la Virgen María y la santa muerte que convergen entre sí para los que creen en ella. 

El negocio lo edificó doña "Mary" hace 40 años decidida a llevar un sustento a su hogar. Optó por las medicinas naturales porque quienes acudían al Mercado Central de aquel Acapulco, llegaban buscando una cura natural para sus distintos males. Creció ayudando a los abuelos de "Iris" en otro negocio de materias primas, pero decidió emprender. 

Este negocio de tres generaciones ha permitido a la familia dar estudios de primaria, secundaria y preparatoria a hijos, nietos y bisnietos. 

Doña "Mary" que padece de las enfermedades que achacan al cuerpo por la edad, no es consciente de que el negocio que echó a andar hace 40 años ya no existe. Hace 27 años también se le quemó su negocio en otro incendio que se registró en el lugar y logró emerger de las cenizas. Ahora es cuidada por sus hijos y nietos en casa y es "Iris" quien se encarga del negocio familiar que actualmente ocupa un pequeño pedazo de banqueta en el área de flores que le prestaron otros comerciantes ante la desgracia que vivió. 

En este pequeño espacio acomodó escrúpulosamente la mercancía que adquirió con el recurso económico que les otorgó el gobierno del estado y el municipio a los comerciantes afectados, porque no pudo rescatar nada tras el incendio. 

- Todavía ni lo asimilo. Uno quedó en shock cuando vimos todo quemado. Hasta la fecha no podemos creerlo. Venir temprano y creer que vas a abrir tu negocio. 

-No rescatamos nada. Cuando yo llegue mi negocio estaba hecho cenizas porque yo vendía en la entrada de donde comenzó el incendio. Mi negocio se había calcinado y mi perdida fue de más de un millón de pesos por tres locales. 

Confiesa que le da miedo volver a invertir en mercancía ante la tragedia porque están en la calle, a la deriva, en el incierto. Sin embargo, sus compañeros de la nave de flores les han demostrado solidaridad. 

- Ellos vieron la tragedia y por eso nos ofrecieron acomodarnos aquí. Ellos nos han traído despensa, comida. Todo lo perdimos y la vida es una rueda, a todos nos puede suceder y Dios no lo quiera, si tú apoyas tiene que ser recíproco. 

Todos los días "Iris" se levanta a las cinco de la mañana, alista a sus hijos para la escuela, los lleva y se dirige a su negocio. Tiene la esperanza de que sus dos niñas y su hijo varón lleguen a ser profesionistas con el recurso económico que obtiene de su negocio heredado, lo plática mientras se sienta en un silla y se alista para bañar en una bandeja al más pequeño de sus hijos que grita: "quiero ser marino".

Mientras lo baña, comerciantes hacen filas a unos metros adentro de la nave de flores donde otros locatarios se turnan para regalarles comida que llevaron en cazuelas. Dicen que lo hacen pensando en que el día de mañana también ellos pueden llegar a necesitarlo.